Emprendedurismo Senior 5.0: Experiencia y Creatividad más allá de los 50
Para algunas personas el concepto de envejecer tiene una connotación negativa; se asocia a la pérdida, a la enfermedad, al aislamiento, al deterioro y al sufrimiento. Sin embargo, para otras, se trata de una etapa más de la vida con aspectos positivos y negativos a la que hay que adaptarse Existe un segmento, cada vez más significativo, de la población que luego de retirarse se perciben así mismos con capacidades para continuar generando valor y sienten interés por retomar la vida activa, ya sea formando parte de un equipo o encabezando un emprendimiento, bajo la premisa de un envejecimiento activo, productivo y saludable. Los seniors 5.0 se apuntan de primeros en la lista de los soñadores que están dispuestos a descubrir los nuevos horizontes de la Cuarta Revolución Industrial.
Migración Digital y Transformación de los Sentidos.
Los profundos y avasallantes cambios, impulsados por el avance de la Cuarta Revolución Industrial y el impacto de la pandemia, están generando una evidente transformación de nuestra percepción e interpretación del entorno. No solo hemos tenido que aprender a usar nuevas tecnologías, nuevos formatos comunicacionales, así como nuevos códigos y protocolos de comportamiento, social y laboral, también ha activado un profundo cambio y transformación de nuestros sentidos, absolutamente indispensable, si queremos avanzar hacia nuevos escenarios y modelos sociales. Si queremos ser parte activa y protagonistas de la nueva Sociedad 5.0, es fundamental el cambio de piel y el despliegue de nuevas alas, para avanzar, con equilibrio y coherencia, hacia nuevos horizontes posibles.
Horizonte 2021: La Educación 4.0 llegó para quedarse
A finales del año 2017, asistimos a un encuentro de saberes e innovación tecnológica: “Rionegro, Ciudad Exponencial y Competitiva”. Entre los excelentes conferencistas invitados, destacó la presencia de Salim Ismail, autor destacado (Organizaciones Exponenciales) y líder transformador (Open ExO). Él nos habló de la disrupción exponencial, de la masificación de la digitalización, la desmonetización en economías digitales y de las grandes e inminentes transformaciones paradigmáticas: de lo físico a lo digital, de lo real a lo virtual, de los productos a las experiencias.
Al cerrar su conferencia nos dejó varias preguntas reflexivas: ¿Cómo acelerar la incorporación de tecnologías exponenciales y disruptivas, con el menor impacto posible, en nuestra sociedad? ¿Cómo prepararnos para los profundos y trascendentales cambios que trae el futuro? ¿Cuándo pasaría todo este proceso de transformación? ¿5 años, 8 años, 10 años?
Lo que él y ninguno de nosotros sabía, en ese momento, es que el Covid-19 nos daría la respuesta a todas esas preguntas en el año 2020.